::ALEGRÍA OLÍMPICA por Fernando Castro::

El placer de comer cochinillos a dos carrillos se remató cuando ya de noche supimos que Madrid había quedado fuera de combate en su demencial intento de "llevar los Juegos Olímpicos" a la capital del reino. Me alegro superlativamente. Faltaría más que en una ciudad gobernada por cretinos de marca mayor, con una alcaldesa que es atroz (el híbrido perfecto de un mazapán rancio y croasant de aquellos que mojaba en el charco arrabalero el mismísimo Leopoldo María Panero por introducir una clave de locura y desencanto), una "oposición" capitaneada por un memo profesional (el Sr. Jaime L. que no sirve ni para hacer la O con un canuto), unos asesores que son sinvergüenzas profesionales y una camarilla de viejunos de todas las edades que destrozan a conciencia cualquier rastro de lo público. Habría sido algo sangrante que en una comunidad y en una ciudad en la que joden todo lo que pueda tener sentido, empezando por la educación y acabando por la cultura (que siempre es la zona para propinas más que para inversiones), encima los trincones profesionales recibieran "el premio". Ahora que vayan, como ya están haciendo, a sacar pecho a decir que "la corona" ha estado de fábula y que Don Felipe es un crack. Un catacrak. No he querido entrar a ver en youtube una serie de traspiés de órdago que, según me dicen, pegó la atolondrada de la señora de Aznar. Todo se pega y la tontería es muy contagiosa. Era fundamental que les dieran a todos los de la candidatura un varapalo. Lo peor de todo es que estos jetas tal vez vuelvan a la carga y así mantendrán a los amigotes en los cargos de "comité preparatorio", "comisión analítica", "estructura de seguimiento" y mil modos de llevarse lo de todos "crudo". Se decía que "la mayor parte de la inversión ya estaba realizada" y que los Juegos nos dejarían una impresionante "herencia". No quiero sonar demasiado punki pero si el futuro era hacer que se subieran al pedestal la tropa de políticos más vomitivos que uno pueda imaginar la única expresión legítima era el NO FUTURE reactivado. Lo dicho, agradezco a los mamones del Comité Olímpico Internacional (una tribu cuya degeneración y descaro es incuestionable) por haber obrado con una "virtud" acciddental: han mandado al basurero de los perdedores a unos patéticos que si llegan a ganar nos sumen una herencia más podría que aquella que ahora intentamos masticar. La felicidad ante el "mal" ajeno, en este caso, es perfecta.