::EL DIOS DE LOS TONTOS por Jesús A. Marcos::

Como se sabe desde antiguo, los tontos abundan: numerus stultorum infinitus est. Pero no es que unos sean los tontos y otros seamos los listos. En realidad, todos formamos parte de esa cantidad interminable de tontos porque todos tendemos a creer tonterías. De lo que se trata es de ponerlas sobre la mesa para, una vez vistas en ella, podernos ayudar los unos a los otros para dejarlas a un lado. 
Pues bien, la tontería que hoy quiero poner en evidencia es esa tan repetida de que Dios es energía. Conozco un montón de tontos que la repiten con un entusiasmo que revela la gran satisfacción que les produce haber llegado a conquistar la que deben creer unavisión sofisticada, iluminadora y moderna de la esencia divina.
Si Dios es energía, al parecer, está ya todo claro: ni más allá, ni cielo, ni infierno, ni nada, pues los tontos saben muy bien que la energía ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. 
Mis tontos más entrañables, que suelen ser amigos míos aficionados a las letras y las artes, como es de suponer, no saben de  la energía nada más que eso, lo de su metamorfosis, y con eso creen tener construida una perfecta teología, aunque nunca la llamarían así porque es un término eclesiástico y antiguo y lo que a ellos les va son las vanguardias. 
También me trato, aunque menos, con otros tontos. A algunos de éstos, en realidad, sólolos leo. Son científicos o, por lo menos, de ciencias y suelen creer que más allá de ellos no hay nada. Saben más cosas que los otros sobre la energía y, sobre todo, se saben algunas fórmulas matemáticas asociadas a ella. Pero, por término medio, no saben demasiado de cosmología y la mayor parte de ellos no están al tanto de cuestiones recientes como la de las supuestas características de la supuesta energía oscura. Y aquellos que sí están al tanto y que incluso se dedican a la cosmología –son ésos con los que principalmente me relaciono como lector-, sin embargo, parecen no haber caído en la cuenta de que sus recientes especulaciones matematizadas son contempladas desde lo alto por  los cuarenta siglos de especulaciones que las han precedido. No estoy hablando de todos los cosmólogos actuales: Penrose, por ejemplo, es tan listo y sabe tanto de la historia del pensamiento que, después de haber contribuido a acrecentar la fuerza delbig bang, se ha cansado de la teoría y se ha puesto a pensar sobre los orígenes de otra manera. 
Y dirán de mí los tontos: ¿y por qué este tonto cree que predicar el dios-energía es una tontería?, ¿es que hay otra alternativa?  Pues sí, les contestaré yo, y está en esos cuarenta siglos (retóricamente, pues son más) de especulación y racionalidad filosóficaque transcurrieron antes de nosotros y que no son, por lo visto, nada molones. Uno de esos pensadores viejos, entre italiano e inglés, se atrevió a decir: Dios es el ser mayor que el cual nada puede ser pensado. Y yo, en mi simpleza anticuada, creo entender que se puede pensar un ser superior al ser de la energía. Pero estoy seguro de que cualquiera de los tontos energéticos, puesto a ello, podría también entender que, de haber un Dios, seguramente estaría más allá de las energías, sean claras u oscuras.

4 comentarios:

  1. Yo soy ateo y he trabajado en la élite científica española. Con científicos de verdad que investigan cosas útiles, no cosmología, que eso no sirve de nada. Como lector últimamente la peña me intentáis colar muchos axiomas, siempre digo que sólo los grandes personajes de la historia (demos nombres: Schopenhauer, Nietszche, Gandhi, Borges, Lem, Dante, Shakespeare, Poe, Lovecraft, Goethe, Cervantes, Dante o Victor Hugo) pueden decir verdades universales. Los demás sólo soltáis tonterías.

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  2. Los científicos de verdad dices que son los que investigan cosas útiles y tú has trabajado con ellos, en la élite española. Es una suerte inmensa para ti hablar desde esa experiencia.
    Pero te planteo lo siguiente: a tu entender, Eintein, que, al parecer, menospreciaba los aspectos prácticos de la ciencia, como mostró, por ejemplo, enfadándose con su hijo cuando éste le comunicó que iba a ser ingeniero, ¿era un científico de verdad o no?
    Por otro lado, ¿por qué crees que la cosmología no sirve para nada cuando está ligada a la investigación sobre partículas elementales, energía, etc., cuyas repercusiones prácticas a nadie se le escapan?
    En cuanto a los grandes personajes de la historia, está bien que los tengas en alta consideración, pero no nos condenes a los demás a decir sólo tonterías, porque, aunque pequeños, también estamos en la historia y procuramos hacer algo positivo en ella.

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  3. Bueno, mi trabajo en el CSIC no fue cuestión de suerte, sino de tener el mejor expediente académico de mi carrera. Investigábamos para poner remedio a enfermedades, para que la gente no se muera, aunque ahora mismo he llegado a un estadio de mi vida que si se muriera todo el mundo a mi alrededor, me pondría muy contento. Aparte de Einstein, también existieron filósofos como Emanuel Swedenborg, que dedicaron su vida a currar con maquinaria y ser prácticos: A facilitar las cosas al usuario, que en definitiva es de lo que se trata. Hacer esta vida más cómoda a los niños de papá...

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  4. Dios no sé si existe, pero Nacho, ¿existe?

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